Uso ilícito y manipulación de la imagen de la doctora Elena Barraquer
23/12/2024
19/04/2021
Dentro del amplio abanico de afecciones oculares, existen patologías y trastornos con una mayor incidencia en la población. Los defectos más comunes son los relacionados con errores de refracción (graduación), mientras que las patologías más habituales afectan la retina, la mácula y el cristalino.
Los defectos de refracción inciden en un gran número de personas y, en consecuencia, son las más conocidas. Las principales son la miopía, la hipermetropía, el astigmatismo y la presbicia o vista cansada. Son problemas de visión que se producen debido a alteraciones en la forma del ojo y su mecánica, que no permiten un buen enfoque.
Defectos de refracción más comunes
En la miopía los objetos lejanos se enfocan por delante de la retina y no sobre ella provocando que la visión de éstos sea borrosa. En cambio, en la hipermetropía los objetos cercanos quedan enfocados por detrás de la retina causando mayor borrosidad cuanto más cerca está el objeto en cuestión. Por su lado, un ojo con astigmatismo generalmente no consigue un enfoque adecuado ni de lejos ni de cerca. Finalmente, el último error de refracción más común es la presbicia, también conocida como vista cansada, defecto producido por la pérdida de elasticidad del cristalino que se manifiesta generalmente a partir de los 40 años y evoluciona con el paso del tiempo.
Estrabismo
Otra afección ocular con una importante incidencia es el estrabismo. Hace referencia a la pérdida de paralelismo de los ojos, hecho que impide que estos no estén alineados en la misma dirección. Existen diferentes factores genéticos, ambientales y ópticos que condicionan el desarrollo de este trastorno.
Ojo seco
Es una enfermedad relativa a la escasez de la cantidad de lágrima o en el deterioro de su calidad y que produce una inflamación de la superficie del ojo. Los síntomas pueden ser escozor, quemazón, sensación de sequedad y arenilla e incluso visión borrosa. Una causa común es la alteración hormonal que deriva en la mala función de las glándulas lagrimales. Suele afectar en mayor medida a las mujeres que a los hombres.
Principales afecciones en la retina
El desprendimiento de retina y la retinopatía diabética son las principales afecciones que puede sufrir la retina. El desprendimiento se produce cuando la retina neurosensorial se separa del epitelio pigmentario y se acumula líquido en el espacio restante entre ambas. La falta de nutrición y riego sanguíneo que sufre la retina provoca una pérdida, en ocasiones irreversible, de visión.
En el caso de la retinopatía diabética aparece cuando se deterioran los vasos sanguíneos de la retina. Es una complicación frecuente de la diabetes mellitus y puede ocasionar un daño progresivo en el globo ocular, dando lugar a una disminución severa de la visión e incluso conducir a la ceguera.
Las patologías asociadas a la edad
Existen patologías inherentes al envejecimiento y la degeneración de las distintas estructuras del globo ocular. La degeneración macular asociada a la edad (DMAE) afecta a más de 800.000 personas en España. Se trata de una enfermedad degenerativa de la mácula que provoca una disminución progresiva de la visión central.
Las cataratas, aunque también pueden ser congénitas, son una de las causas más frecuentes de pérdida de visión entre las personas de edad más avanzada. Se deben a la pérdida de transparencia del cristalino lo que se traduce en una disminución de la agudeza visual.
Por su parte, el glaucoma, que también puede afectar a la infancia, es una enfermedad crónica irreversible del nervio óptico que constituye la segunda causa de ceguera del mundo occidental.
En las tres patologías es de vital importancia un diagnóstico y tratamiento precoz para lograr un mejor pronóstico visual. Desde el Centro de Oftalmología Barraquer recomendamos realizar revisiones oculares periódicas a partir de los 50 años, especialmente en personas con antecedentes.
Dr. Jose Lamarca, oftalmólogo del Centro de Oftalmología Barraquer
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