Síntomas y diagnóstico del ojo seco

10/04/2024

El ojo seco es una condición común que ocurre cuando la cantidad de lágrimas que produce el ojo es insuficiente o cuando la calidad de las mismas no es adecuada para mantener una correcta lubricación y una buena salud ocular. Las lágrimas son esenciales para mantener la superficie del ojo lubricada, proporcionarle nutrientes y protegerlo contra infecciones. Cuando hay una deficiencia en la producción o calidad de las lágrimas, pueden surgir distintos síntomas que, sin un tratamiento adecuado, pueden derivar en complicaciones más severas.

Síntomas del ojo seco

• Escozor
• Quemazón
• Ardor
• Ojos rojos o cansados
• Sensación de sequedad y de arenilla
• Intolerancia a lentes de contacto
• Espasmos de los párpados
• Fotofobia
• Visión borrosa
• Fluctuación de la agudeza visual

Estos síntomas suelen agravarse cuando el paciente fija la vista, parpadea poco o en ambientes con poca humedad o con mucho viento.

Diagnóstico del ojo seco

Es muy importante un buen diagnóstico por un oftalmólogo u oftalmóloga, ya que en algunos casos el uso de lágrimas artificiales no es suficiente para paliar los síntomas que pueden ser molestos e incluso afectar a la calidad de vida de algunos pacientes.

En el Centro de Oftalmología Barraquer contamos con personal médico especializado y la tecnología más avanzada para realizar el mejor diagnóstico y aplicar el tratamiento más adecuado según cada caso. Para llevarlo a cabo, ofrecemos distintas pruebas que nos ayudan a determinar la condición de cada paciente:

• Test de Schirmer: Mide la cantidad de lágrimas producidas.
• Test de osmolaridad lagrimal: Mide el grado de inflamación a nivel de la superficie ocular.
• Test de ruptura lagrimal: Mide la calidad de la película lagrimal.
• Meibografía: Detectamos afectación en las glándulas lipídicas para prevenir la evaporación lagrimal.

Actualmente, en el centro ofrecemos varios tratamientos para el ojo seco, desde aplicación de humectantes hasta sesiones de luz pulsada intensa (IPL). Este tratamiento es uno de los más efectivos, ayudando a la activación de las glándulas de Meibomio, esenciales en la producción de la capa lipídica de las lágrimas.