Retinopatía diabética: Prevención y opciones de tratamiento
14/11/2024
13/11/2024
Comer siguiendo los ritmos circadianos y consumir suficiente proteína de calidad, hidratos de carbono de bajo índice glucémico y añadir alimentos ricos en aminoácidos esenciales como el triptófano, puede ayudar a tener un sueño de mejor calidad y un descanso reparador. Eliminar la nicotina, el alcohol y la cafeína también es muy importante para mejorar el descanso.
El triptófano es el precursor de la serotonina y también de la melatonina, la hormona que regula el sueño. El pavo, el pollo, los huevos y otras proteínas de calidad como los pescados azules son muy buenas fuentes de triptófano. Las nueces, almendras, semillas de sésamo y de calabaza son ricas en triptófano, además de grasas saludables y minerales. La leche y otros lácteos, frutas como el kiwi y el plátano, las legumbres, la avena y los cereales integrales en general, también son fuentes muy buenas de serotonina. El zumo concentrado de cereza ácida y la misma cereza son grandes fuentes de melatonina.
Por tanto, por el tipo de alimentos comentados con anterioridad, seguir la dieta mediterránea, rica en legumbres, frutas, cereales integrales, pescado y verduras, disminuyendo la ingesta de carne roja y alcohol, se ha asociado con mejores resultados del sueño y descanso.