¿Cómo realizamos las inyecciones de neuromoduladores?
25/04/2025
22/04/2025
Incorporar estos ejercicios en tu vida diaria puede ofrecerte múltiples beneficios.
• Aumento de la masa muscular: con el tiempo, el entrenamiento de fuerza puede ayudar a desarrollar músculos más grandes y fuertes.
• Mejora del metabolismo: más masa muscular significa un mayor gasto calórico, incluso en reposo.
• Salud ósea: el entrenamiento de resistencia puede aumentar la densidad ósea, reduciendo el riesgo de osteoporosis.
• Prevención de lesiones: fortalecer los músculos y las articulaciones puede ayudar a prevenir lesiones en actividades diarias y deportivas.
• Mejora de la salud mental: el ejercicio, incluido el entrenamiento de fuerza, se ha asociado con una reducción de la ansiedad y la depresión.
Empieza con un calentamiento para preparar tus músculos y evitar lesiones. Usa pesos ligeros y aumenta gradualmente a medida que te sientas más fuerte. Permite que tus músculos se recuperen entre sesiones de entrenamiento.
De pie con los pies al ancho de los hombros. Baja las caderas como si fueras a sentarte en una silla, manteniendo la espalda recta. Regresa a la posición inicial.
Colócate en posición de plancha con las manos al ancho de los hombros. Baja el cuerpo hasta que el pecho casi toque el suelo y luego empuja hacia arriba. Para hacerlo menos difícil puedes apoyar las rodillas en el suelo.
Acuéstate boca abajo y levanta tu cuerpo apoyándote en los antebrazos y las puntas de los pies. Mantén el cuerpo en línea recta desde la cabeza hasta los talones.
Texto del Centre de Fisioteràpia Saifis