11/10/2024
Los destellos en los ojos, también conocidos como fosfenos o fotopsias, son percepciones visuales de luz que no están realmente presentes en el entorno. Pueden aparecer como puntos, rayas o formas brillantes que se ven en el campo visual, ya sea el periférico o central. Se producen debido a la estimulación anormal de la retina o del nervio óptico que puede ser causada por varias razones, dependiendo de la fuente del estímulo.
- Desprendimiento de vítreo: con la edad, el gel vítreo que llena el interior del ojo comienza a encogerse y a volverse más líquido. A medida que se separa de la retina, puede tirar de ella levemente, lo que provoca una estimulación mecánica de las células de la retina provocando destellos de luz. Si el desprendimiento de vítreo es fuerte, puede llegar a causar un desgarro o un desprendimiento de retina.
- Desprendimiento de retina: si la retina se desprende del tejido subyacente que la nutre puede producir una estimulación mecánica constante que genera destellos de luz. Puede ser causado por un trauma ocular, miopía severa o, como se comentaba anteriormente, fruto de un desprendimiento de vítreo.
- Migraña con aura: algunas personas que sufren migrañas pueden estar acompañadas por auras visuales, que pueden incluir destellos, zigzags brillantes o diferentes patrones en el campo visual.
- Presión en el ojo o el nervio óptico: frotarse los ojos, sufrir un golpe en la cabeza o un cambio brusco en la presión intraocular pueden estimular las células de la retina o del nervio óptico, causando la percepción de destellos.
- Problemas neurológicos: algunos trastornos neurológicos como tumores cerebrales, epilepsia o esclerosis múltiple pueden afectar la manera en que el cerebro procesa la información visual y derivar en visión de destellos o luces.
Podríamos resumir que los destellos en los ojos se producen porque algún elemento está estimulando las células de la retina o del nervio óptico de manera anormal, ya sea por causas mecánicas o neurológicas. En muchos casos, los destellos suelen ser inofensivos, pero si van acompañados de una pérdida repentina de la visión, un aumento de "moscas volantes" o si son persistentes y no están relacionados con migrañas conocidas, es importante consultar a un oftalmólogo de inmediato para descartar lesiones graves y obtener el tratamiento adecuado.
Dra. Mª José Capella Elizalde, oftalmóloga del Centro de Oftalmología Barraquer